Desde mi visita a Santa Rita el pasado lunes – no soy de
religión alguna, pero me enrolle con la “patrona
de las causas imposibles” cuando era niño y nunca me ha fallado –las cosas han
cambiado de tanto que se disolvió la ausencia de respuesta y ha germinado lo
que puedes leer en cualquiera de los enlaces, al final de este comentario. Os
comentaré cómo sale, pero estoy esperanzado.
Este principio de año está siendo un flash para mí, claro
que estoy en Las Palmas y aquí la gente es “guay”. Felizmente que me ha tocado
vivir aquí la neura de los atentados de París, convivo con musulmanes, católicos
y judíos y giris; no tenemos problema alguno entre nosotros. Las
confrontaciones provienen de intolerancias y de intereses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario