La cotidianidad tecnológica
Ya estamos en Villaviciosa. Tiempo radiante. A nuestra llegada, ayer, sentimos la cálida
acogida de nuestro apartamento y ya sabes el buen sabor de boca que nos dejó la
conversación con el alcalde de Campóo de En medio.
Pero…
Ayer Julen se quedó atrapado en la puerta corrediza de
Mercadona.
Siempre se ha abstenido de intentar entrar. Sabe muy bien que
no le permiten la entrada y harto avisto el funcionamiento de la puerta tiene fuera
un gran parterre para explayarse, pero
La puerta le atrapó, como si la intención fuera la de
partirle en dos mitades. Gritos desgarradores. No fui el único que corrió en
su auxilio. Todo quedó en un susto.
En cuanto fue liberado de la puerta opresora, Julen tenía
prisa para contarle a Iris su incidente. Se me adelantó.
Hoy hemos sido víctimas de la tecnología de nuevo. Habíamos
pensado ir a Llastres: https://www.google.es/search?q=fotos+de+lastres+asturias&dcr=0&tbm=isch&source=iu&ictx=1&fir=SS7hh0n6PYzd3M%253A%252CDQUda5OJfMb-IM%252C_&usg=__1P0bYFUmqDJRHHKSH7gzQ9OVqz8%3D&sa=X&ved=0ahUKEwjtkta-yM_XAhWI0RQKHTwoBrQQ9QEIPTAK#imgrc=SS7hh0n6PYzd3M:
Hemos perdido toda la mañana por fallos de Internet. Nos hemos sentido atrapados,
como si la maldita puerta quisiera partirnos a los tres en dos mitades.
La tecnología no ha impedido que estemos en esta cita. Los
problemas con Internet llevan ya un tiempo agobiándonos, pero…
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