La verja
Villaviciosa, 10 de septiembre, 9:41 h.
Ayer fue día de sentir y de
recibir regalos de la vida. Jornada lluviosa y de nubarrones, con intervalos en
que el sol mostraba su imperio. Poco duraban y estaban rasgados por explosiones
de cohetes.
Tenía que hacer compra; este lunes
es día de cierre. Mercadona se impone en estas circunstancias, por la cercanía
y por el césped donde puedo dejar suelto a Julen, puesto que tiene prohibida la
entrada.
El aprovecha; sabe atraerse protectores
con sus lamentos. Así conoció a Joan y a los muchos que vienen a visitarle, a
su “despacho del ventanal.
–Has sido rápido…
No sonaba a reproche, aunque la mirada de la madre condenada
a la silla de ruedas y la voz de Antonio, los gitanos de los que antes no
conocía los nombres, expresaban que hubieran querido dar más mimos al que se
pretende abandonado.
–Si dispones de unos minutos, voy a casa y te traigo las
fotocopias de unos documentos que he preparado para ti. –Antonio deja entrever
su delicada timidez–. ¿Puedo dejarte a mi madre?
–Es un placer para mí.
–Unos minutos, “ma”.
Ella, no he tenido ocasión aún de conocer su nombre,
hizo un gesto de resignación que tiñó
rápidamente con la solemnidad de la bendición.
La espera fue breve. Pese a mis intentos, no logré que
hablara, demasiado ocupada con las carantoñas que intercambiaban Julen y ella.
–Este es el primer documento encontrado hasta la actualidad
sobre los gitanos en Asturias. Lo tienes en la web del Museu Virtual del Poble Gitano a Catalunya.
Antonio se sentía útil l y lo es. He comprobado la excelencia
del enlace que me facilitó y conservaré las fotocopias como oro en paño.
El documento en cuestión es una Real Pragmática de Felipe V,
con fecha del 14 de junio de 1717. Tiene por objeto designar 14 poblaciones del
Principado para el asentamiento de gitanos. Entre ellas estaba Oviedo.
–No hay constancia de la obediencia. Sí la hay del rechazo. –Mi
interlocutor documenta su afirmación con fotocopias que me regala–. Aquí tienes
la respuesta al requerimiento del gobierno a la
Real Audiencia de Oviedo, para que explicara el proceso de integración
de los gitanos. Está fechada el 27 de octubre de 1745. Te he señalado un
párrafo altamente significativo:
A pesar de ser esta ciudad y capital del
Principado, uno de los lugares destinados a domicilio para los gitanos, cuenta
para su felicidad con la suerte de que no la frecuentan, y aunque unos cuantos
habitan divididos en otros pueblos y lugares, lo hacen con oficios conocidos y
se constata que había de manera permanente y también en sus respectivos
parajes, sin que se vea que vaguen por ferias y mercados ni que se agrupen para
alguna finalidad […]
Este hombre es una joya; él
lamentó sus fallas.
–No he logrado encontrar el documento del requerimiento. Es
de suma importancia conocer los motivos y la argumentación.
–Podemos deducirlos, en parte, por la respuesta y por la
insistencia del gobierno. Tú explicabas la utilidad de los gitanos el otro día.
Yo añado que a principios de los sesenta, en Madrid, familias gitanas recogían
las basuras gratis, su ganancia provenía del reciclaje.
Mi intención era más la de tranquilizar que la de competir
con un interlocutor mucho más informado que yo sobre el tema.
–Así es: excelente ejemplo. Ahora se paga por un servicio
menos respetuoso con el medio ambiente.
Mis buenas intenciones interrumpieron el discurso que tenía
tan bien preparado mi generoso informador. Se notaba y guardé silencio para
dejar que continuara:
–En el documento que te he mostrado se ve que pese a la mala
gana con que las autoridades asturianas recibieron a los gitanos, estos se
instalaron y debían estar integrados porque no hay constancia de que hubiera
víctimas en estas tierras de las múltiples persecuciones Pese a la mala acogida
de las autoridades, hay constancia de la instalación e integración de los
gitanos en Asturias. –Me sigue sacando documentos–. En este podrás ver que en la
Gran Redada de Gitanos, el 30 de julio de 1749 se encarceló entre 10 000 y 12 000
niños, viejos, enfermos, adultos en España, y no consta ningún caso en
Asturias.
Su mirada me invitó a intervenir.
La Gran Redada de
Gitanos que tuvo lugar el 30 de julio de 1749
–Hay ausencia en el censo que me has mostrado.
–No es el caso, como testimonian estos relatos de viajeros
que te presto. –Tuvo que esforzarse para aclararlo–. No tengo más que un
ejemplar de cada. Verás que, pese al discurso oficial, había gitanos en Asturias.
Ejercían diversos oficios, incluido el de gaitero.
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