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Ayer terminó la cita en una comuna imaginaria. Hoy el cielo
está gris. He dormido bien y he tenido un sueño. Estaba muy bien con alguien en
un gran anfiteatro. Ignoro la razón por la que me desplacé y a mi regreso, ya no estaba la persona.
No se trataba de una pesadilla, simplemente un malestar.
No es un poco lo que pasó en ese pueblo de Colonia del
Sacramento cuyo nombre nos quedamos sin conocer:
Wili
Brandt
Mismo lugar, 13 de abril
Nadie ha visto a Adrian, Álvaro y Gonzalo. Tampoco
estos han dado razón alguna para ausentarse, será que nuestra peculiar comuna
les asustó o los temas tratados no gustan, no sé tengo curiosidad de saber el por
qué de sus ausencias. Lo que queda de la comuna es la reunión en la plaza de un
pueblo de Colonia de Sacramento cuyo nombre quizá nunca sabremos; si no
regresan los desaparecidos quizá nunca lleguemos a existir.
Pensamos, cada un@ de las que quedamos, mientras
paseamos nuestras soledades por un pueblo en entredicho. Eso sí, cada día nos
encontramos, a la misma hora, en la plaza. Cumplimos, Isabel Carlota se nos ha
metido y hay cada vez más gente que asiste al espectáculo que ofrecemos en su
plaza.
Hoy no ha sido así; l@s asistentes han dejado de ser
sombras, en boca del nuevo adherido Marcel, un cubano..
—
La leyenda de Willy Brandt como estadista política
europea comenzó a forjarse en el frente de Huesca, en 1937. Inició su plan para España desde que ostentó la
representación de su partido de los Trabajadores Socialistas de Alemania ante el gobierno legal, víctima de un golpe
de Estado.
Marcel es un hombre de una setentena bien cuidada que presume de “colchón”. No es que aluda a
ello; pero se nota en sus actitud y en su simplicidad, como si estuviera
diciendo “con tal de tener un techo, comida y si posible un traguito”. Trasmite
eso en una intervención que engancha con el tema del debate diario previsto en
la agenda de Iris.
—
En 1974, el Partido Socialista había perdido la calle en
beneficio de otros partidos, el Partido Comunista, por ejemplo. El entonces
Canciller socialdemócrata alemán decidió, financió, formó y logró, un PSOE que
tomara el poder y forjara el bipartidismo; como si dijéramos un esperpento
eternamente español. Salió a la luz que los dineros invertidos por el mandamás
alemán, provenían de Flick, un canalla que beneficiaba de fortuna propulsada
por el trabajo de los prisioneros de Hitler. Curioso; el hijo subvencionaba a todos los partidos del poder
en Alemania. El escándalo vino de ahí, puesto que se detectó la generosidad de
los subvencionados.
¿Soy
yo o es Strelitzia quien llora?
¡No
nos dejemos comer la merienda esta vez!
Gracias a l@s 371 que acudisteis a la cita de ayer: https://carlos-ortizdezarate.blogspot.com.es/
Gracias a Iris
Gracias a ti
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