martes, 19 de marzo de 2019

Nuestra lucha cotidiana


En esta semana iniciaré  la publicación de los borradores.
Quiero empezar por explicar los hilos conductores:
La actualidad está huérfana de política; se invoca la “Razón de Estado” y se atribuye la paternidad de la misma a Maquiavelo.
Las versiones de esos “imperativos categóricos” están plagadas de perversidad, léase corrupción. Maquiavelo no era corrupto y escribió la mayor parte de su obra en un exilio nada dorado. No solamente se dedicó en esta faceta de su vida a la escritura o a la recopilación de su experiencia política, sino que aprendió a producir su pan en la pequeña propiedad en la que se le permitió recluirse. Organizó una cooperativa con l@s que le ayudaban a cultivar, criar animales... Maquiavelo no era amante de lujos.
¿Por qué dedicó El Príncipe a Lorenzo II de Médicis? Esta familia de poderosos florentinos formaba parte de sus verdugos.
La única hija de Lorenzo de Médicis, Catalina, tenía “El Príncipe” por “Biblia”, ejerció el poder como regenta de Francia y no dudó en utilizar el crimen como “Razón de Estado”.
Mi amigo Maquiavelo es el relato que escribe Catalina de Médicis en los últimos meses de su vida.


Gracias a l@s 573 que acudisteis a la cita de ayer: https://carlos-ortizdezarate.blogspot.com/
Gracias a Iris
Gracias a ti


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