La
Iglesia vasca
Me di cuenta de que había varias Iglesias en
España poco después de llegar a Madrid, encontré la de aquí en un mundo
desconocido en un pueblo que tiene fueros. El representante de Dios en la
parroquia de Llodio me lo explicó en carta que respondía a mi inquietud.
Aún puedo recitarla: “Los fueros, como me
indicaste, sacan nuestro ser que el atavismo encierra, la Iglesia foral lo
siente así, la Iglesia feudal lo ve de otra manera.”
Las cartas de mi tío el cura me han sido de gran
ayuda; lamenté mucho su muerte y he escuchado todos sus consejos, como ha
ocurrido con mis padres y mi hermana Cecilia, especialmente. Necesitaría
escribir una gran lista para ser justo.
El grave problema es que no solamente se trata de
las Iglesias: los españoles estamos divididos
por los campos que activan los púlpitos.
Pasé unos meses para asimilar eso.
No estaba solo; tenía a los tíos y a Cecilia y,
sobre todo, necesitaba convencer a Érice de que necesitaba a ese mozalbete que
se empeñaba en meter las narices en su negocio de tejidos.
—Siempre trabajas demasiado ¿Tan poca confianza te
merezco?
La mirada de mi sobrino a mis papeles me irrita.
Sus palabras me conmueven.
—Sabes que delego, con mucho cariño en ti.
Haces lo que yo haría y dejas muy claro que añades
lo que has aprendido de mí. Estoy orgulloso de ti, pero no me gusta que te
metas en mis intimidades.
Mis palabras no parecen ser apreciadas.
—Llevamos diez minutos en tranquila espera para
que te dignes cenar en familia. ¡Es el único momento que compartimos!
Mi amante sobrino se acerca para ayudarme a
acompañarle.
Gracias a l@s 607 que acudisteis a la cita de
ayer: https://carlos-ortizdezarate.blogspot.com/
Gracias a Iris
Gracias a ti
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